domingo, 30 de abril de 2017

Jean Jacques Pérennès: 'El miedo al Islam es irracional'

El Cairo,27 abr. 2017,elmundo.es,FRANCISCO CARRIÓN


Jean Jacques Pérennès F.C.

El padre Jean Jacques Pérennès guarda el "rostro sereno del islam" que conoció durante los 15 años que vivió en El Cairo, entre los muros del Instituto Dominico para los Estudios Orientales. Este monje francés, actual director de la Escuela Bíblica de Jerusalén, defiende una máxima tan sencilla como revolucionaria para desafiar al temor que suscita la religión de Mahoma. "Hay que propiciar los encuentros. Obligar a que la gente empiece a decir: 'Todos los musulmanes son malos salvo mi amigo Mohamed'", arguye Pérennès. "El Papa Francisco debe reafirmar la hermandad entre cristianos y musulmanes en Egipto en un momento de muchas dificultades", agrega en una entrevista con este diario.

Soplan vientos de reconciliación entre Al Azhar y el Vaticano...

Sí. Cuando hay tensiones es momento de hablar. Hay muchos asuntos en los que avanzar y resulta vital que el Papa Francisco y el gran jeque de Al Azhar, Ahmed el Tayeb, cultiven una buena relación. Al Azhar está bajo presión para modernizar su discurso y necesita ser visto como un socio fiable.

¿Se ha enterrado la discordia que provocó el discurso de Benedicto XVI en 2006?

El Papa emérito nunca dijo que el islam estuviera ligado a la violencia. Simplemente reprodujo una cita. En cualquier caso, reconozco que no fue una buena idea. Yo vivía por aquel momento en El Cairo y fuimos conscientes de que nos metería en problemas. Luego hubo quien avivó el fuego y lo usó con fines políticos. Los últimos tres Papas han tenido una posición similar en el acercamiento al islam. La base sigue siendo los documentos del Concilio Vaticano II como la declaración Nostra Aetate, que establece que la "Iglesia mira con aprecio a los musulmanes que adoran al único Dios, viviente y subsistente, misericordioso y todo poderoso".

¿Existe el diálogo interreligioso?

No. Para que exista, se necesita confianza. Más que de diálogo, yo prefiero hablar de encuentros que promuevan la comunicación. Hace treinta años, por ejemplo, en Egipto no había problemas de convivencia. Tenemos que volver a la situación en la que musulmanes y cristianos eran amigos y hacían cosas juntos. Para que haya un diálogo interreligioso necesitamos palabras comunes que en estos momentos casi no tenemos. Y sólo se logrará si entablamos relaciones personales de amistad.

Entre sectores de la sociedad europea y algunos círculos católicos se ha extendido la vinculación del islam con la violencia...

Así es. Es una consecuencia del yihadismo y el islam político. Es un debate abierto. Para algunos, la violencia se halla en las raíces de la religión. Otros, en cambio, subrayan que quienes atacan en nombre del islam son personas sin rumbo, que carecen de empleo y futuro y emplean el islam como simple narrativa.

¿Y usted qué piensa?

Yo no puedo aceptar ni comprender que en Europa haya una gran cantidad de ciudadanos que jamás hayan conocido o entablado conversación con musulmanes y que aun así profesen tanta hostilidad hacia ellos. Sólo puede ser resultado de la propaganda.

¿Cómo evitar el auge de la discordia religiosa?

Hay que trabajar en la calle. La amistad entre credos diferentes es posible pero se debe construir a diario al nivel de las relaciones humanas. Hay que hablar de desafíos comunes como la educación, la justicia social o la ecología. En tiempos de violencia y miedo, tenemos que mantener la calma y la esperanza. Tenemos que volver a edificar una relación positiva. Siempre surgirán problemas pero se pueden solucionar. El miedo al islam en Europa es irracional y se cura con relaciones personales.

¿Tiene la Iglesia católica responsabilidad en el discurso del odio que enarbola la extrema derecha europea?

No lo creo. Es cierto que hay católicos muy agresivos con el islam pero la Iglesia tiene una postura equilibrada. Hablamos de la necesidad de la amistad y la relación mutua sin olvidar a los cristianos de Oriente Próximo. La clave es la educación. En Occidente tenemos muy buenos centros de estudios sobre el islam pero la gente es muy ignorante, incluso aquella que ha recibido formación.

En Egipto, la visita se produce con la minoría cristiana aún en duelo por los últimos atentados...

Es alarmante. Si los cristianos acaban abandonando Oriente Próximo se privará a la región de su diversidad y se hundirá en un círculo cerrado en el que sólo habrá uniformidad. Tal escenario sería un drama.

El periplo del Papa tiene un fuerte trasfondo político. ¿Le preocupa que sea utilizado por el régimen para blanquear su represión?

Ese riesgo existe pero forma parte del juego político. Y el Papa lo sabe muy bien. No es un ingenuo. Es un hombre valiente que quiere mostrar su preocupación y fraternidad por quienes sufren. Yo creo que es un buen momento para la visita aun cuando pueda ser usada políticamente.

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