sábado, 10 de enero de 2009

Unas 3.500 personas se manifiestan en Palma para expresar su condena a la invasión de Israel en Gaza

PALMA,10-01-2009,EUROPA PRESS.

Unas 3.500 personas, según fuentes policiales, se manifestaron hoy en Palma para expresar su condena a la invasión que está ejerciendo Israel en la franja de Gaza así como su rechazo a los ataques terrestres que mantiene el país hebreo contra el pueblo palestino, que ya se han cobrado más de 700 víctimas mortales. Entre los protestantes se dejaron ver numerosos integrantes de más de 70 entidades sindicales, políticas, culturales y civiles.

La manifestación, convocada por la Plataforma per Palestina, arrancó en la Plaza de España, donde ya se empezaron a escuchar las primeras consignas contra el conflicto, como "viva la lucha del pueblo palestino" y "Zapatero, Moratinos, todos somos palestinos" y se leyeron pancartas que rezaban 'Una humanidad, una lucha, no al nuevo holocausto', 'La libertad y la gloria para Palestina' e 'Israel = terror'.

Asimismo, algunos de los manifestantes quemaron dos banderas israelíes justo antes de comenzar la protesta, una acción a la que precisamente se refirió esta semana el delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socías, quien aseveró que la quema de enseñas que no sean españolas no constituye delito, según la legislación vigente en el Estado español. Durante la concentración los asistentes también portaron una bandera palestina de unos diez metros de largo.

Tras la quema de las banderas israelíes, la consellera de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración, Fina Santiago, que secundó la manifestación, se mostró en desacuerdo con este tipo de acciones ya que "representan países y las banderas deben respetarse". La titular de este departamento expresó en declaraciones a los medios su deseo de que finalicen los ataques en Gaza por tratarse de una "guerra absolutamente desproporcionada" y reclamó que los países cumplan las resoluciones de la ONU.

En similares términos se pronunció el dirigente de EU en Baleares, Eberhard Grosske, quien tildó el conflicto de Gaza de "absolutamente indignante" y exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que sea "más valiente", al tiempo que lamentó que la comunidad internacional esté "cargada de buenas intenciones, con un discurso compasivo pero no contundente para la desgracia del pueblo palestino".

"Si Israel sospechase que tras estas palabras de condena hubiese acciones concretas, como sanciones y un aislamiento diplomático, Israel se pensaría más sus actuaciones", incidió el también concejal de Bienestar Social y Participación del Ayuntamiento de Palma, quien recriminó que en estos momentos "tras las palabras sólo hay palabras y los líderes como Zapatero deberían poner una cruz a todo lo que Israel está provocando".

Por su parte, la la presidenta de la organización 'Taula per Palestina', Laura Camargo, subrayó que continuarán las concentraciones cada día a las 19.00 horas, advirtiendo de que "no nos detendremos hasta que acabe la masacre".

La manifestación transcurrió bajo el lema 'Aturem la massacre del poble palestí' y recorrió la calle Oms, las Ramblas, la calle Unió y el Passeig des Born, donde se leyó un manifiesto, y finalizó frente a la Delegación del Gobierno. A través del manifiesto, Plataforma per Palestina lamentó que la población civil de Gaza, sometida a un "durísimo bloqueo" por parte de Israel, vive desde hace meses "una dramática situación de pobreza y carencias de todo tipo".

Desde la organización, integrada por entidades como Asociación Al Maghreb, Asociación Argelina, Fundació Es Sirat, Liga Musulmana de Baleares, Casal Amistad Mallorca Cuba y la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, agregó que a todo ello se ha sumado la "brutal agresión" del ejército israelí desde el 27 de diciembre, primero en forma de ataques aéreos y, desde el 3 de enero, de invasión terrestre, lo que ha provocado centenares de muertos, "muchos" de ellos civiles, y miles de heridos.

Paralización de la masacre

El documento reclama así que se paralice la masacre y pide una solución al conflicto basada en el reconocimiento de los derechos del pueblo palestino. Entre las reivindicaciones de la plataforma, se encuentran el final de la ocupación de Cisjordania, la paralización de la construcción del muro y el abandono de los asentamientos de colonos, y que Israel cumpla todas las resoluciones de Naciones Unidas sobre el conflicto.

Por último, Plataforma per Palestina lamentó que los representantes de la Unión Europea y el Gobierno se hayan limitado a pedir el fin de la violencia sin ejercer las medidas de presión que están a su alcance, entre ellas diplomáticas, económicas y comerciales. También exigió la "urgente" suspensión de los acuerdos comerciales entre la UE e Israel, que se frene el comercio de armas con este Estado y que la población mallorquina no compre productos israelianos.

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